Es posible que tu niño no logre dejar impecable el piso al usar una escoba pequeña, pero lo anima a ayudar en casa, lo que representa una oportunidad única para el desarrollo de su lenguaje.
Según la patóloga pediátrica del habla Mandy Alvarez, “la naturaleza de la rutina de las tareas domésticas ofrece expectativas predecibles. Cuando los niños saben que anticipar, están más disponibles para aprender”. Además, Alvarez agrega, “la exposición a un lenguaje similar cada vez que el niño realiza una tarea refuerza ese aprendizaje”.
No solo cuentan las tareas reales. “Imitar las tareas”, dice Alvarez “crea una oportunidad invaluable para el juego imaginativo, que es esencial para el desarrollo del lenguaje. Mientras un niño imita una tarea, está creando su propia historia, adquiere nuevas perspectivas y juega con ideas. El juego imaginativo también es importante porque, como el lenguaje, implica la capacidad de representar simbólicamente. A medida que el juego de un niño evoluciona, su lenguaje también lo hace”.
Veamos algunas habilidades lingüísticas que tu pequeño aprende durante tareas simples y rutinarias como barrer, limpiar mesas y guardar cosas.
Cómo las tareas domésticas enseñan habilidades lingüísticas
Vocabulario & Conceptos
Las tareas domésticas exponen a tu pequeño a vocabulario y conceptos nuevos como, escoba, barrer, tela apretar, limpiar, en, a través, adentro, etc.
Clasificación
Cuando tu pequeño te ayuda a guardar cosas, aprende a clasificar objetos en categorías. Mientras recoge juguetes, por ejemplo, aprende que los bloques van juntos en una caja, los carritos van en otra caja y los carros grandes van en la repisa. En la cocina de juguete, puedes enseñarle a poner las verduras en un recipiente, las frutas en otro, etc.
Seguir instrucciones
Entender y llevar a cabo las instrucciones es una habilidad compleja del lenguaje y es la base para el aprendizaje y el éxito en la vida diaria. Tu pequeño obtendrá mucha practica siguiendo instrucciones simples de uno o dos pasos mientras ayuda en casa.
Secuencia
Ser capaz de realizar acciones en el orden correcto para cumplir una tarea es una habilidad esencial del lenguaje, y las tareas representan una excelente forma de enseñarlo. Recuerda que tu pequeño necesitará de tu ayuda en repetidas ocasiones para poder lograr las secuencias por sí mismo.
Colaboración
Trabajar exitosamente con otra persona para completar una tarea es una habilidad de lenguaje pragmático (social) que abarca todas las áreas de la vida. Ayudar en casa ofrece muchas oportunidades para colaborar. Por ejemplo:
- Tu pequeño te entrega un juguete, y tú lo pones en el espacio o contenedor correcto.
- Tu barres el piso, y tu pequeño acerca el recogedor.
¡Los beneficios de las tareas domésticas no solo ayudan al aprendizaje del lenguaje! También cultivan la independencia e incluso conduce a adultos más felices y exitosos.